Recientemente, la Brigada Municipal de Obras intervino en la acera junto a la iglesia de Santiago, en la plaza del mismo nombre, para hacer accesible la entrada a personas con movilidad reducida. La intervención ha consistido en adecuar dos pequeñas rampas a los laterales de la portada, salvando así el pequeño escalón de la acera. Para ello, se ha reutilizado el mismo adoquín existente en el resto de la plaza.
Se trataba de una demanda de una parte de la población, en su mayoría de edad avanzada y con problemas de movilidad. Se prevén intervenciones similares en otros puntos de la ciudad.