Ayuntamiento Sangüesa / Zangozako Udala

Memoria histórica: Tropezones

Entre los años 2021 y 2023 se llevó a cabo el proyecto de Memoria Histórica Tropezones gracias al cual se colocaron 42 placas en las aceras de los portales donde vivieron personas asesinadas y represaliadas por el golpe de estado en 1936. Con este proyecto el Ayuntamiento de Sangüesa / Zangoza pretende tener un recuerdo en sus calles de todas esas personas que fueron expulsadas y asesinadas a la fuerza de nuestra localidad. Recupera así su recuerdo un lugar del que nunca debía de haber sido arrancadas, su hogar y sus calles.

Aquí puedes leer alguno de los testimonios que sus familias nos han facilitado.

ALEJANDRO ARANGUREN QUINTANA

Nació en Sangüesa el 26 de febrero de 1901. Leandro su padre, levantó la casa junto con sus hijos. No se fue nadie hasta que no se pagó todo. Cuando acabaron, la mitad emigró a Argentina. Carmelo y Valeriano no volvieron jamás. Alejandro sí, dos veces. En su último viaje consta en su pasaporte como motivo “la familia”. El golpe de estado del 36 le pilló aquí, en esta orilla de un mundo feroz que volvía a donde solía, a devorar a sus hijos. Y cuando todo se complicó le tocó alistarse porque no podía haber hombres en las casas y sin combatir. O Lucio, su hermano, o él. Y se alistó él. Fue llevado con otros varios en un camión a Zaragoza. El chófer los descargó diciendo: “Aquí os entrego un camión de cerdos”. Integraron el Tercio Sanjurjo Bandera Palafox 2ª Compañía. Les dieron instrucción, les pagaban el haber, los sacaron al frente en Almudévar. Al día siguiente los volvieron a Zaragoza sin combatir, los desarmaron y empezaron los fusilamientos en masa. Es uno de los episodios más oscuros de la Guerra Civil sobre el que seguimos esperando alguna luz, algún día. Y se quedaron con su sangre como si les perteneciera. En esta casa se lloró esa sangre cada vez, todas las veces. Diega, su madre, no podía de ninguna manera encajar cómo los buenos, los que creían en Dios con todos sus crucifijos, habían sido capaces de asesinar a su hijo. Con la rabia de que fue capaz se enfrentó al cura y María, la hermana de Alejandro, fue contra los que consideraba responsables. Y luego a casa, a masticar todo ese dolor sordo y mudo, sobre todo mudo.

Parece ser que llevaban los cadáveres al cementerio de Torrero en el camión de la basura y que dejaba un rastro de sangre que se toleraba mal. Allí habían cavado una enorme fosa. Todo el país era una enorme fosa. Y allí los dejaron, llenos de plomo. Su cadáver nunca se recuperó. En la última imagen que nos dejó, poco antes del crimen, se le ve con una sonrisa apretada. Yo sueño que esa sonrisa se ancha y ríe para siempre.


ANTONIO GARCÉS GOÑI

Al hermano del abuelo Áureo Garcés lo fueron a buscar, se lo llevaron y lo mataron. Esto es lo que sabemos de Antonio Garcés, cuya memoria queremos honrar. Una vida resumida en tan pocas palabras. Una vida única arrebatada. Podemos imaginar el dolor de sus padres y hermanos, su miedo, la rabia por la injusticia. Arrancado de su familia por sus ideas. Señalado, silenciado y asesinado. Pero no olvidado.

Antonio Garcés nació en Sangüesa el 12 de junio de 1908. Era hijo de Antonio Garcés Zugasti y Petra Goñi Iriarte. Contaba 28 años cuando lo asesinaron. Tenía el puesto de escribiente en la fábrica de harinas. Era un hombre curioso, inquieto, librepensador y culto para aquellos tiempos. No iba a misa.

Tal vez era una persona que no gustaba a los conservadores porque iba por libre, no frecuentaba la iglesia, se ganaba la vida bien y no tenía que pedir favores a nadie. Lo envidiaban por todo esto y por el puesto de trabajo que tenía. Una vez fusilado, ese empleo fue ocupado por un familiar de un conocido carlista y presunto chivato.

A Antonio lo detuvieron, lo llevaron al Círculo Carlista y le obligaron a tomar aceite de ricino. La familia fue a preguntar y no les dieron justificación de por qué lo habían cogido. Al día siguiente se lo llevaron a la fuerza, al frente de Sanjurjo, junto a más hombres, y lo fusilaron en Zaragoza junto a otros 13 sangüesinos entre el 2 y el 9 de octubre de 1936. Sus restos están en una fosa común del cementerio de Torrero.

Antonio fue exterminado víctima de la “depuración” para la Nueva España. Alguien de Sangüesa lo incluyó en la lista negra. Nunca sabremos quién fue.


ENRIQUE LORÉS BAMBÓ

Vecino de Sangüesa, nacido en Yeste ( Huesca), el 3 de abril de 1909. Era hijo de Eulalia Bambó y Fidel Lorés. Estaba casado con Mª Teresa Remón, ambos tenían un hijo, José Lorés Remón que nació el 25 de febrero de 1935.

Pertenecía a Izquierda Republicana. Y en el momento de su detención trabajaba en la serrería de Sangüesa. Fue detenido en julio de 1936 y encarcelado en el Fuerte de San Cristobal. Se le obligó a alistarse en el Tercio de Sanjurjo en Zaragoza. Y junto a muchos de sus compañeros del Tercio, fue fusilado entre el 4 y el 10 de octubre del 36 en dicha ciudad.

Su cuerpo presuntamente está enterrado en la fosa común del cementerio de Torrero donde reposan los restos de los fusilados del Tercio. El monolito del cementerio de Sangüesa en recuerdo de los vecinos fusilados extrajudicialmente, el Muro del Parque de la Memoria en Sartaguda y el monumento Memoria del cementerio de Torrero en Zaragoza, constituyen sus lugares de reconocimiento y recuerdo.


FÉLIX LARRIQUETA

Félix Larriqueta Maisterra, nació en Uztarroz (valle del Ronkal) el 1 de agosto de 1881. Se casó con Blasa Bozal Bernat de la misma localidad, el 26 de septiembre de 1909 en Isaba. Tuvieron 5 hijos: Félix, Modesta, Plácido, Gregoria y Mª Alegría.

Félix desempeñó el trabajo de carabinero por todo el valle y otros lindantes, terminando su periplo en Isaba donde nació su última hija. En 1935 se trasladó a Sangüesa y vivió en la Avenida Padre Raimundo, en casa Urzaiz.

Fiel y leal a la bandera que él había jurado, se granjeó enemistades entre superiores y Clero, motivos que causaron su posterior asesinato. Fue una persona íntegra, leal, culta y muy amante de su familia. Se mantuvo fiel a sus ideales, hasta el 3 de septiembre de 1936, cuando fue vilmente asesinado en el alto de Loiti.

Sus restos fueron exhumados por su familia, sin permiso legal, el 25 de octubre de 1978, junto con otro compañero y fue enterrado en el cementerio de Aldunate al día siguiente. Tras muchos años de dudas respecto a inscribir sus nombres en la lápida del cementerio de Aldunate, nuestros muertos tienen nombre y apellido desde el 25 de septiembre de 2021. Los familiares de todos ellos, sentimos un profundo orgullo.


HERMANOS OROZ BUEY

Los hermanos Oroz Buey, pertenecían a la casa “Obispo” y fueron una de las familias más represaliadas tras el Golpe Militar Franquista. Eran hijos de Víctor Oroz Sola de Guetadar y de Paulina Buey Mayayo de Undúes Pintano. Ambos formaron una familia numerosa de 8 hijos. Tres de ellos fueron asesinados tras el Golpe Militar, Félix, Gregorio y Ramón; dos de ellos; Isaac y Guillermo fueron encarcelados en el Fuerte de San Cristobal y una hermana, Presentación, murió años después, de dolor y pena por todo lo sufrido.

  • Oroz Buey Félix: Nacio en Sanguesa el 1 de abril de 1907 y fue asesinado en Aldunate (Loiti) el 3 de septiembre de 1936. Estaba afiliado a la UGT. Al producirse el alzamiento militar, junto a otros izquierdistas sangüesinos, huyó hacia el Monte de Peña. Fue apresado. Según fuentes familiares, antes de huir pasó por la ermita Virgen del Camino para despedirse. Sus restos fueron enterrados en una fosa junto a otros fusilados en Loiti, y tras ser exhumados por familiares en 1978, fueron enterrados en el cementerio de Aldunate.
  • Oroz Buey Gregorio: Nació en Sangüesa el 9 de mayo de 1896 y fue asesinado en el Alto de Aibar el 2 de septiembre de 1936. Estaba casado con Primitiva Oneca y vivía en la casa familiar de ella en Cáseda. Tenían 3 hijos. Estaba afiliado, al igual que sus hermanos, en la UGT y trabajaba en las obras del Canal de las Bardenas en Cáseda.
  • Oroz Buey Ramón: Nació en Sangüesa el 30 de agosto de 1910, y fue asesinado en Zaragoza a principios de octubre del 1936. Estaba afiliado a la UGT. Fue detenido y obligado a alistarse en el Tercio de Sanjurjo en Zaragoza. Como muchos de sus compañeros del Tercio, fue asesinado entre el 4 y el 10 de octubre en esta ciudad. Sus restos descansan en una fosa común en el cementerio de Torrero en Zaragoza.
  • Oroz Buey Presentación: Murió en el Hospital de Pamplona el 30 de abril de 1937 a los 28 años, dos meses antes de la salida del Fuerte de San Cristobal de sus hermanos Isacc y Guillermo.
  • Oroz Buey Isaac: Nació en Sangüesa el 2 de junio de 1912. En el 36 fue detenido y conducido al Fuerte de San Cristobal.. A la salida del Fuerte, en junio del 37, fue movilizado en el ejército de los sublevados. Herido en enero del 38, murió al terminar la Guerra en el Hospital de Navarra, a consecuencia de las torturas a las que fue sometido y al sufrimiento moral que le causó la muerte de sus hermanos.
  • Oroz Buey Guadalupe: Murió en Pamplona en 1949 como consecuencia del enorme sufrimiento moral y penalidades que su familia sufrió .

Guillermo y Andresa Oroz Buey, fueron los únicos hermanos supervivientes.


FRANCISCO ESTABOLITE HUALDE (1903-1936)

Nació en Sangüesa el 21 de Junio de 1903, se casó con Ines Franco Cordeu, natural de Liédena y juntos tuvieron cuatro hijos. Migraron a Andalucía por trabajo. Era panadero, tenía varios apodos: “el moreno” o “el popular” y era de izquierdas. Según historiadores de la zona parece ser que era anarquista de la CNT o afín a este sindicato.

El 18 de julio de 1936, él y otros dos hombres con los que trabajaba, tuvieron un altercado con la Guardia Civil llegando a los tiros y donde murieron dos personas. Unos días más tarde, la Falange fue a buscarlo a su casa y se lo llevaron al cuartel. De ahí al barco prisión Cabo Carvoeiro amarrado en el rio Guadalquivir y tras pasar un mes, el 22 de Agosto de 1936 lo sacaron por “bando de guerra” y lo fusilaron junto a otras 12 personas en el paraje de La Cebonera entre Carmona y Viso del Alcor.

Creemos que lo enterraron en la fosa común sobre la que construyeron el actual cementerio de San José que se encuentra en Mairena del Alcor, otro pueblo de la provincia de Sevilla. Esa fosa común está aún sin exhumar, por lo que a fecha de Enero del 2023 no hemos recuperado sus restos. El asesinato de nuestro padre, abuelo y bisabuelo ha sido un secreto a voces en nuestra familia, sufrido por la primera generación, silenciado por la segunda y recuperado en la tercera, a nuestro parecer, como en muchas otras familias. Ahora somos las nietas y nietos los que cogemos el testigo de encontrar a nuestro ser querido, darle la dignidad que se merece y cerrar la herida abierta por tantos años.


GERMÁN ZAGURRIA CAMPAÑA

Nació en Sos de Rey Católico el 10 de Octubre de 1892. Murió Exiliado en Ziburu el 23 de Diciembre de 1963. Se caso con Eugenia Olave Sague.

Perteneció a C.N.T. Sangüesa e hicieron frente la noche del 18 de Julio a los fascistas que se habían levantado en Sangüesa.


ISIDRO ARTIEDA MARTÍNEZ

Nació en Sangüesa el 15 de mayo de 1904. Soltero, vivía con sus padres, Feliciano Artieda Felipe, de Sangüesa y Delfina Martínez Ongay, de Cáseda, en la calle Amadores. En la misma casa vivía su hermana Juana Artieda Martínez y su esposo Francisco Iso Jiménez, con el que forjó una gran amistad.

Isidro era un joven fuerte y valiente, trabajaba como peón y estaba afiliado a UGT. Le arrebataron la libertad en el verano de 1936 en el Círculo Carlista. Junto a Francisco Iso, amenazados de muerte, subieron a un camión que los conduciría a Zaragoza, donde los acuartelaron e instruyeron como legionarios en el Tercio Sanjurjo. Pronto fueron enviados al frente pero sin llegar a combatir regresaron a Zaragoza, los encerraron en los barracones y los fueron sacando en pequeños grupos. Isidro y Francisco se encontraban en diferentes filas. Francisco con un gesto preguntó a Isidro dónde iban y éste se encogió de hombros, nunca más volvieron a verse.

Isidro murió fusilado a principios octubre de ese mismo año. Francisco logró regresar a casa tras la guerra desolado por volver solo, sin saber lo que le había ocurrido a su querido cuñado. Juana y Francisco vivieron y murieron con el dolor de no saber dónde yacían los restos de Isidro, de paradero desconocido a día de hoy.

El nombre de Isidro se encuentra en el monolito en memoria de los ciudadanos navarros fusilados pertenecientes al Tercio Sanjurjo ubicado en el cementerio de Sangüesa. También en el cementerio de Torrero en Zaragoza existe un monolito en su memoria.

Le recordaremos siempre.


JAVIER ROCAFORT APESTEGUÍA

Nació en Sangüesa el 23 de novienbre de 1907 y fue asesinado el 7 de abril de 1937. De profesión electricista y afiliado a Izquierda Republicana, trabajaba en la extensión del tendido eléctrico de Sangüesa.

Pocos días después del Alzamiento fue detenido y conducido al Fuerte San Cristóbal, donde estuvo preso hasta su asesinato. Era uno de los llamados presos gubernativos, encerrados sin juicio y que sufrieron las duras condiciones del Fuerte
simplemente por sus ideas políticas. Tenía esposa, Dominica Lozano, y dos hijos, Roberto y María Ángeles. Tras la detención de su marido, Dominica se trasladó a Pamplona y no descansó ni un momento hasta conseguir todos los certificados que le exigían para su liberación. Se la concedieron pero unos días antes de abandonar el Fuerte, alguien sacó a Javier y a otros presos y los asesinaron. Era habitual que grupos de pistoleros falangistas y carlistas de los propios pueblos de origen de los presos con la complicidad de los guardias los sacaran del Fuerte y los fusilaran en los alrededores.  En la última carta a su esposa desde prisión escribía: “Me recuerdo mucho de los chicos. Por mí estad muy tranquilos, estoy bien. Como yo nada he hecho, a mí nada me harán”.

Poco después de enviar estas líneas lo mataron. Ni siquiera pasados ya muchos años desde la Guerra quisieron sus asesinos decir dónde están enterrados los restos de Javier y de los otros presos. Los hijos, nietos y bisnietos de Javier Rocafort han conservado, orgullosos, su recuerdo y su legado.


JESÚS IRIBARREN GARAYO.

Nació en Sangüesa el 24 de diciembre de 1900. Era hijo de Juan Iribarren Amézqueta y de Luisa Garayo Laborería. Se le conocía con el apodo “Pocasombra”. Estaba casado con María Iso Tabar, natural de Sangüesa. Tuvo tres hijas: María Jesús,
María Luisa y Asunción. María Jesús falleció de niña.

Vivió en América durante varios años, donde trabajó como chófer. Volvió a Sangüesa y se dedicó a la agricultura y a la ganadería. No parece que estuviera identificado políticamente y tampoco afiliado a ningún partido político, pero fue fusilado en Lecáun el 28 de agosto de 1936.

Inicialmente fue enterrado en el arcén de la carretera. Terminada la guerra, subieron sus restos al cementerio de Lecáun, y desde el año 87, éstos reposan en un nicho del cementerio de Sangüesa junto a su esposa.

 


JESÚS VILLABRIGA MIGUÉLIZ

Nació en Sangüesa el 10 de junio de 1904. Pertenecía a la familia conocida como “Katatxu”.

Estaba casado con Rufina García y tenía dos hijos, Esperanza y Jesús. Era obrero y estaba sindicado en la CNT.

Fue asesinado en Zaragoza el 24 de noviembre de 1936, junto a muchos de sus compañeros de lucha. Se supone que su cuerpo está enterrado en una fosa común en el cementerio de Torrero de Zaragoza, junto a todos ellos.

A su mujer Rufina, le cortaron el pelo y la pasearon por las calles de Sangüesa, como represalia. La familia padeció penurias económicas y finalmente emigró a Baiona en Iparralde.

Se le homenajea en el monolito del cementerio de Sangüesa en recuerdo a los vecinos asesinados en el 36 y en la placa colocada en el que era su domicilio, en la calle Santiago, 19, de Sangüesa. Para la familia fue muy complicado hacer el duelo, dado que nunca se encontró su cuerpo.


JOAQUÍN BEORLEGUI ZARATIEGI

Joaquín nació el 3 de abril de 1907 en Sangüesa. Era hijo de Antonio Beorlegui y Margarita Zaratiegi. Estaba casado con Raimunda Arilla Abadía de Peña. La familia era conocida como los de “la Torre”, por venir de la Torre de Peña.

Trabajaba de peón y era sindicalista de la UGT. Fue obligado a alistarse al Tercio de Sanjurjo de Zaragoza, el 10 de septiembre de 1936. Y en los primeros días de octubre, fue asesinado, en Zaragoza, junto a muchos otros compañeros del Tercio, 13 de ellos de Sangüesa.

En febrero de 1979 se realizó la exhumación de la fosa común en el cementerio de Torrero, Zaragoza, promovida por una coordinadora de familiares de fusilados de Navarra, La Rioja y Aragón. Los restos, sin identificar, fueron repartidos por los cementerios de los pueblos que asistieron a la exhumación. No se sabe, por ello, dónde está su cuerpo.

El monolito erigido en el cementerio de Sangüesa y la placa colocada junto a la puerta de su casa de Sangüesa, sirven de recuerdo.

El asesinato de Joaquín generó en la familia indefensión, dolor y amargura. Pero, estos hechos no fueron silenciados y se transmitieron con mucha tristeza a las nuevas generaciones.

El reconocimiento de la muerte injusta de estas personas que defendieron la democracia con su vida, es un deber moral de las generaciones posteriores. Su recuerdo nos enorgullece.


JUAN MANGADO GARCÍA

Juan Mangado García nació en Olite 8 de marzo de 1883. Era vecino de Sangüesa donde vivía con su mujer Dorotea Legorburu Guebara. Sus padres José Mangado y Luciana García, vivían también en Sangüesa. Tuvieron 5 hijos: Cecilio, Luisa, Hermenegildo, Aurora y Juan.

Era electricista y trabajaba en la central eléctrica. Militaba en la UGT. Fue detenido a la edad de 54 años, el 25 de julio de 1936 y trasladado al fuerte de San Cristobal. El 10 de abril de 1937 le dijeron que salía en libertad, pero fue asesinado en las inmediaciones del fuerte nada más salir. Su lugar de memoria está en el cementerio de Antsoain.

La familia al completo se trasladó a San Sebastián, tras saber que habían sido denunciados. Dorotea, su mujer, sufrió mucho con la muerte de su marido. Enferma y triste murió antes del año 50. Su hijo Juan, el pequeño, luchó en el frente por la República y escapó finalmente a Francia, donde ingresó en el Campo de Concentración de Gurs. En el 39 viajó en el winipeg, barco que Pablo Neruda fletó para trasladar a los exiliados españoles a tierras chilenas. Su hijo mayor, Cecilio, se exilió a Francia y posteriormente a Bruselas. Finalmente decidió establecerse en Chile con su hermano Juan.

Los dos hermanos hablaban mucho de lo que vivieron. Ambos reiniciaron sus vidas en Chile, pero añoraron mucho su pueblo y su tierra, soñado siempre en volver algún día a ella


LIBORIO MARCO MIGUÉLIZ

Liborio nació en Sangüesa el 25 de julio de 1898. Pertenecía a la casa “Ginés”. Era hijo de Mariano Marco Sabio y de Alejandrina Miguéliz Sanz, ambos naturales de Sangüesa, y tenía 4 hermanos y hermanas: Martín, Vicenta, José y Javiera.

Fue asesinado por los franquistas el 16 de septiembre de 1936, a la edad de 37 años, dejando viuda a su mujer Concepción Zubiate Murillo, y huérfanos a una hija de 2 años, María Luisa, y un hijo, que nació 3 meses después, Mariano.

Agricultor y afiliado a la CNT, trabajó solidariamente apoyando a las familias afectadas por la huelga del Canal y defendiendo un reparto más justo y equitativo de la riqueza.

Tras el golpe franquista contra la República, fue detenido y conducido a la cárcel de Sangüesa. Tres días después fue liberado en muy mal estado, tras haberle obligado a ingerir aceite de ricino (tortura habitual). Después, le obligaron a alistarse en el Tercio Sanjurjo, pero no se le consideró apto por problema en la vista y volvió a Sangüesa. Unos días después, fue detenido a las 8 de la tarde en Sangüesa. Le introdujeron en una camioneta situada al otro lado del puente y le llevaron al pueblo de Nardués-Aldunate, en Loiti, donde le asesinaron junto al muro del cementerio a las 10 de la noche. Su cuerpo fue abandonado durante la noche y enterrado a la mañana siguiente, en lugar desconocido.

La familia tachada de “rojos” tuvo que soportar vivir junto a los asesinos de su marido y padre, las burlas y amenazas de los “vencedores”. Hoy sus nietas siguen buscándole e intentan que se repare su memoria y se haga, por fin, justicia.

En la foto, Liborio está arriba, el primero a la izquierda.


LUIS (1902-1970) Y JOSÉ BENEDÉ ARTIEDA (1912-1936)

Luis y José Benedé eran hijos de Teodoro Benedé Baztán y Angela Artieda Gogocerna. Tenían 3 hermanos: Laureano, Saturnino y Ángel. Los cinco eran sindicalistas de la CNT.

LUIS, nació en Sangüesa el 15 de marzo de 1902.Trabajaba en ”LA INDUSTRIAL S.A.” y era un activo militante sindicalista de la CNT. Estuvo preso en las cárceles de Alcalá de Henares y de San Sebastián. Tras ser puesto en libertad bajo fianza en 1947, pasó los Pirineos y se exilió en la zona francesa de Grenoble-Saboya. Ya en Francia, trabajó en industrias hidroeléctricas y siguió activo en el sindicalismo y el movimiento libertario.

Siempre añoró volver a su Sangüesa natal, pero murió en Berziers (Francia), el 13 de mayo de 1970, sin conseguirlo.

JOSÉ, nació en Sangüesa el 15 de marzo de 1912. Era, al igual que sus hermanos, un militante activo de la CNT y trabajaba también en ”LA INDUSTRIAL S.A.”. En una acción de asalto, programado por el sindicato para apoyar económicamente a familias empobrecidas, al BANCO HISPANO AMERICANO, en Pamplona , en
junio de 1934, , fue detenido, juzgado y condenado a 7 años de prisión en la cárcel de Valencia.

En 1936 lo trasladaron al penal de San Cristóbal. En una «saca», el 17 de noviembre de 1936, cuando él creía que era puesto en libertad acogiéndose a una reciente LEY DE AMNISTIA, lo fusilaron en las laderas del monte, sin llegar a Artica.

Foto 1, José el segundo por la izquierda.

Foto 2, Luis, el cuarto por la izquierda.

 


MARTÍN LOZANO SEGURA

Martín nació en Sangüesa el 11 de Noviembre de 1888. Asesinado en Zaragoza 02 de Diciembre de 1936.

Se caso con Victoria Echarte Zabaldica y tuvieron 5 hijos: Mariluz, Alfonso, Esperanza, Miguel y Blanca.

Perteneció a C.N.T. Sangüesa y hicieron frente la noche del 18 de Julio a los fascistas que se habían levantado en Sangüesa.


PRIMITIVO Y EUGENIO PALACÍN CAMPAÑA

  • PRIMITIVO PALACÍN CAMPAÑA

Nació en Sos de Rey Católico el 25 de Noviembre de 1906. Asesinado en Zaragoza 04 de Noviembre de 1936.

Se casó con Claudia Ortega Esposito y tuvieron 1 hijo: Juan. Perteneció a C.N.T. Sangüesa e hicieron frente la noche del 18 de Julio a los fascistas que se habian levantado en Sangüesa.

  • EUGENIO PALACÍN CAMPAÑA

Nació en Sos de Rey Católico el 06 de Septiembre de 1913. Torturado y asesinado como escarmiento popular el 30 de Julio de 1936. Perteneció a C.N.T. Sangüesa e hicieron frente.


SABINO (1904-1936) Y AGUSTÍN IBÁÑEZ AZCOITI (1913-1936)

Sabino y Agustín Ibáñez Azcoiti, eran hijos de José Ibáñez Iriarte, de Sangüesa y de Isidra Azcoiti Baztan, de Cáseda. Ambos tenían 3 hermanos más: Juan, Mercedes y María. Pertenecían a la familia de los “Santaeulalia”.

SABINO nació el 6 de octubre de 1904 en Sangüesa. Era agricultor y estaba afiliado a la UGT. Fue fusilado el 28 de agosto de 1936 y enterrado en el arcén de la carretera que sube a Abinzano. Posteriormente sus restos fueron trasladados al cementerio de Lecáun y finalmente reposan en el cementerio de Sangüesa.

AGUSTÍN nació en Sangüesa el 26 de enero de 1913. Era soltero y trabajaba de albañil. Militaba en la CNT. Fue fusilado probablemente, cerca del pueblo de SOS, en los montes de Peña, a finales de julio o principios de agosto. Parece ser que formaba parte del grupo de escapados de Sangüesa que participaron en el intento de asalto al Círculo Carlista de Sangüesa, la noche del 18 de julio. No se sabe dónde fue fusilado ni donde fue enterrado. Tenía sólo 23 años.



LUGARES

  • TERCIO DE SAN JURJO (14 sangüesinos)El tercio de San Jurjo se constituyó el 1 de septiembre de 1936 en Zaragoza. Unos 600 izquierdistas navarros, aragoneses, riojanos y sorianos, fueron obligados a alistarse a cambio de salvar sus vidas.Sin entrar en combate, entre el 2 y el 9 de ese mismo mes, los fusilaron masivamente en grupos de 20 (225 navarros). Los cadáveres se enterraron en una fosa común en el cementerio de Torrero en Zaragoza. En febrero de 1979 asociaciones de familiares exhumaron los restos y los enterraron, sin identificar, en diferentes pueblos.
  • LOITI (10 sangüesinos asesinados)Entre julio y diciembre de 1936 fueron fusilados extrajudicialmente, en las dos vertientes del Alto de Loiti, en parajes y localidades como Abinzano, Lecaun, Sengaritz, Izko, Aldunate, Nardués,Tabar y Muguetajarra, al menos 69 personas detenidas por su actividad política y sindical, 10 de ellas de Sangüesa. A estos vecinos de Sangüesa asesinados en el Alto de Loiti, se les obligaba a cruzar el puente y a montarse en una camioneta, que les conducía a la muerte. Nunca nadie volvió del otro lado del puente.

 

  • PENAL DE SAN CRISTOBAL (6 sangüesinos)

Fortaleza militar situada en la cima del monte Ezkaba, a unos diez kilómetros de Pamplona. Tras el golpe de estado contra la república y hasta 1945, fecha en la que se cierra el penal, 7.200 presos pasaron por esta cárcel, mayoritariamente republicanos. 750 dejaron la vida en ella. En los primeros meses tras el golpe, se produjeron gran cantidad de sacas (listado de los presos que iban ser fusilados cada día) y muchos otros fueron abatidos en las laderas del monte, tras anunciarles que eran puestos en libertad. Las condiciones del penal eran inhumanas: hacinamiento, hambre, frío, chinches, enfermedades…La fuga del 22 de mayo de 1938 es la mayor fuga de presos en el Estado Español y en Europa, tanto por el número de huidos, 795 presos como por las consecuencias criminales de la misma, 207 presos muertos.

  • CARCEL DE TORRERO, ZARAGOZA (6 sangüesinos)

Concebida para albergar apenas a 200 personas, el 1 de septiembre de 1936, se hacinaban 1300 presos. Centenares de ellos y ellas sufrieron las sacas indiscriminadas y fueron conducidas al cementerio para ser ejecutadas. “A las cinco de la mañana llevaban a los presos a la capilla para recibir apoyo espiritual; a las 6 los guardias civiles comenzaban la faena de atarles las manos. De la cárcel, los trasladaban a las tapias del cementerio en una camioneta. Los colocaban en fila mirando la tapia. Tras caer derribados por los tiros del pelotón de fusilamiento, el teniente de turno se acercaba y descargaba 2 ó 3 tiros de pistola en la cabeza.

  • SIERRA DE PEÑALa noche del 19, horas después del Golpe de Estado contra la República, un grupo de obreros se dirige a ocupar el Circulo Carlista situado en la Calle Mayor, con intención de resistirse a la sublevación franquista.Este intento fracasa y muchos de los participantes, escapan a la Sierra de Peña con intención de pasar a alguna localidad leal al gobierno de la República. Los partidarios del golpe, llevan a cabo continuas batidas por la sierra que tienen como consecuencias fusilamientos extrajudiciales y detenciones.

 

 

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